THEODOR LUDWIG
WIESENGRUND ADORNO Y EL PENSAMIENTO NEGATIVO EN EL SIGLO XX
DOCUMENTO PREPARADO POR GM
CAPAYPRY CON EQUIDAD SOCIAL DESDE FLORIDA URUGUAY. ENERO 2024.
FILOSOFÍA PARA NO FILÓSOFOS
·
SABER MÁS, DUDAR Y ROMPER PARADIGMAS ES LO
MÁS LÓGICO, ¿SE ATREVEN?
·
EN ESTA OPORTUNIDAD CON ADORNO Y LA
ESCUELA DE FRANKFURT – TEORÍA CRÍTICA, SU ORIGEN, EVOLUCIÓN
MAPA
CONCEPTUAL DE ADORNO
Theodor Ludwig Wiesengrund Adorno (pronunciación en
alemán: /ˈteːodoːɐ̯ ʔaˈdɔɐ̯no/ (
Por su relación con su madre decide usar el apellido materno y no el paterno. Tiene un doble aporte en su vida, uno burgués de su padre judío, y otro mediterráneo de su madre italo corsa interesada en la música, por eso sus dos pasiones: la música y la filosofía.
LA
EVOLUCION DE LA ESCUELA DE FRANKFURT EN EL SIGLO XX Y SU CONTEXTO DE LA TEORÍA
CRÍTICA
UN PREZI
SOBRE LA ESCUELA DE FRUNKFURT, SU ORIGEN, SU EVOLUCIÓN Y CAMBIOS SEGÚN LOS CAMBIOS
SOCIALES
https://www.mindomo.com/es/mindmap/escuela-de-frankfort-9aee2bc0bd634de891b10b72799b4a7d
EVOLUCIÓN
DEL PENSAMIENTO EN EUROPA
A MODO DE INTRODUCCIÓN Y DE
REFLEXIONES PARA NO FILÓSOFOS
ESTOS ESQUEMAS
PRESENTADO DE MÁS DE DOS SIGLOS HACIA EL 2024 NOS DA LA PAUTA DE LO FERVIENTE
DE LA EVOLUCIÓN DEL PENSAMIENTO, Y SU ADAPTACIÓN A LOS CAMBIOS. POR
ESO ES BUENO LA DUDA CARTESIANA RACIONAL Y LOS PARADIGMAS DE LAS REVOLUCIONES
CIENTÍFICAS DE KHUN.
SI BIEN
ESTA TEORÍAS DE HACE 2 SIGLOS SIEMPRE INFLUYEN, Y TAMBIÉN DA MATERIALES PARA
HACER SUS DIFERENCIAS, NOS PARECIÓ OPORTUNO PRESENTAR LA VIDA Y OBRA DE UN
PENSADOR CLAVE DE LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX, CON LA PARTICULARIDAD
DE VENIR DE UNA FAMILIA BURGUESA, JUDÍA Y CON FORMACIÓN CULTURAL, MUSICAL Y CON
APORTES DE FILOSOFÍA A LA ESTÉTICA POR SU MADRE: ADORNO, APELLIDO DE SU MADRE.
ESO YA DICE MUCHO.
ORIGINARIAMENTE
DE FORMACIÓN KANTIANA, HEGELIANA Y MARXISTA, QUE TUVO QUE EMIGRAR A EEUU PARA
CONTINUAR TRABAJANDO, Y NO SER ASESINADO POR SER JUDÍO Y SU PENSAMIENTO EN LA
ALEMANIA NAZI (LA PREGUNTA CAPSIOSA: ¿POR QUÉ TODOS LOS PENSADORES
EUROPEOS SE FUERON PARA USA, TIERRA DE LIBERTADES? ¿Y CRÍTICAN SU MODELO
ECONÓMICO SOCIAL DEL CAPITALISMO PRIVADO?). LAMENTABLEMENTE FALLECE
EN 1969, NO PUDO VER LA CRISIS DEL PETRÓLEO DE 1973, LA CAÍDA DEL MURO DE
BERLIN EN 1989, COMO LA IMPLOSIÓN DE LA URSS, CON LAS ÚLTIMAS CRISIS
FINANCIERAS DEL MUNDO OCCIDENTAL, Y EL AVANCE ASIATICO Y MUSULMÁN EN RUSIA Y
TODO EUROPA – EEUU Y EL MUNDO ÁRABE.
SI NO
TUVIERON OPORTUNIDAD DE VIVIRLO, NO LOS PODEMOS CRITICAR CONTRA FACTICAMENTE, PERO EN ADORNO, COMO OTROS
PENSADORES QUE, SI VIERON ALGUNOS DE ESOS ACONTECIMIENTO DE SU MISMA ESCUELA Y
ÉPOCA, TODAVÍA SIGUEN PENSANDO EN EL HOMBRE NUEVO, EN UNA SOCIEDAD MEJOR BASADA
EN LA SOLIDARIDAD Y LA LIBERTAD. ALGUNOS, INCLUSO ADORNO, HABERMAS, SARTRE,
SIMONE DE BEUVOIR, CRITICARON EL MODELO SOVIÉTICO Y SE DESILUCIONARON, PERO
TODOS SUS CRÍTICAS SON MUY EUROPEAS, CONTRA EL MODELO CAPITALISTA, ES CLARO Y
DE ESPERARSE, PERO MUY POCOS HACE LÍNEAS CONTRA EL NUEVO CAPITALISMO
DE ESTADO SIN LIBERTAD DE CHINA, DE LOS EXTREMISMOS CONTRA LA LIBERTAD, EN OCCIDENTE
Y EN EL MUNDO MUSULMÁN, QUE SIEMPRE SE SUPO QUE ESTUVO PRESENTE. SE PUEDE DECIR
QUE MIRAN LA PAJA EN EL OJO AJENO. ESTO SERÁ MATERIA DE LOS NUEVOS PENSADORES
DEL SIGLO XXI, QUEDAN PREVENIDOS Y PARA LA REFLEXIÓN, AH…NO INVALIDA EL
PENSAMIENTO EN SU ÉPOCA, SON UNOS GRANDES REFERENTES.
POR ESO EL DOC
PREPARADO TIENE MOMENTOS PARA LEERLO: 1. VIDA Y OBRA DE ADORNO.2. VIDEOS CORTOS
PARA ENTENDER EL PENSAMIENTO DE ADORNO Y LA ESCUELA. 3. SÍNTESIS DE UN TRABAJO
DE FARINA EN ESPAÑOL. A DISFRUTAR, LUEGO HAY UNA IMPORTANTE BIBLIOGRAFÍA PARA
AMPLIAR SI LO DESEAN.
Biografía
Theodor Adorno en 1919.
Adorno nació en una familia burguesa acomodada
de Fráncfort del Meno (estado de Hesse). Su padre, Oscar Alexander
Wiesengrund, era comerciante de vinos, y su madre, María Calvelli-Adorno,
era soprano
lírica. Su madre
y su hermana Agatha, una pianista de talento, se hicieron cargo de la formación
musical de Adorno durante su infancia.
Estudios
Asistió al Kaiser Wilhelm Gymnasium, donde
destacó como excelente estudiante. Durante su juventud conoció a Siegfried
Kracauer, con quien mantuvo una estrecha amistad, a pesar de que
este era catorce años mayor. Juntos leyeron la Crítica de la razón pura de Kant, experiencia que marcó a Adorno
en su formación intelectual.
Hacia 1920 compuso sus primeras obras musicales. Se
trata de música de cámara vanguardista, atonal. Después de graduarse con méritos en el Gymnasium,
Adorno se inscribió en la Universidad Johann Wolfgang
Goethe de Fráncfort del Meno, donde estudió filosofía, sociología, psicología y música. En 1924 obtuvo su título con
una disertación sobre Edmund
Husserl.
Entretanto, escribió varios ensayos de crítica musical. Por un tiempo, el joven
Adorno consideró la posibilidad de dedicarse a la música como compositor y
crítico. En 1925 se fue a Viena, donde estudió composición
con Alban
Berg y
frecuentó a otros dos compositores clave de la Segunda Escuela de Viena: Anton Webern y Arnold Schönberg. Las teorías de este último
sobre la tonalidad libre fueron fundamentales en la formulación de la idea de
la Nueva Música, que Adorno desarrolló en muchos de sus ensayos. En los ensayos
sobre música, Adorno ligaba la forma musical con complejos conceptos filosóficos5. Las implicaciones
conceptuales de la nueva música no eran compartidas por los protagonistas de la
Escuela de Viena, razón por la cual Adorno decidió regresar a Fráncfort y
abandonar su carrera musical.
En Viena, Adorno también conoció a otros
intelectuales cuyos intereses no estaban necesariamente ligados a los círculos
musicales. Asistió a las charlas de Karl
Kraus, el famoso
satirista vienés, y conoció a Georg
Lukács,
cuya Teoría de la novela había impactado a Adorno en la
universidad. De vuelta en Fráncfort, trabajó en su tesis doctoral bajo la
dirección de Hans
Cornelius.
Finalmente, en 1931 obtuvo su venia legendi (el diploma que lo
acreditaba como profesor) con su trabajo Kierkegaard: Konstruktion des
Ästhetischen.
Exilio
En 1932 se incorporó al Institut für Sozialforschung (Instituto para la Investigación
Social), adscrito
a la Universidad de Fráncfort, de inspiración marxista,
aunque pronto el régimen nacionalsocialista le retiró su venia
legendi y tuvo que abandonar el país, huyendo del nazismo. Tras unos años en Oxford, en 1938 se decide a cruzar
el Atlántico para instalarse en Nueva York, donde tenía su sede el Instituto de Investigación
Social en el
exilio. En 1941 se traslada a California para continuar trabajando en
colaboración con otro miembro del Instituto, Max Horkheimer. Dialéctica de la
ilustración. Fragmentos filosóficos (1944-1947) será uno de los
múltiples resultados de esta colaboración.
Todos los pensadores
influyentes
Regreso y restablecimiento de la Escuela de
Fráncfort
A finales de 1949, finalizada la segunda guerra mundial, vuelve a Fráncfort con su
colega Max
Horkheimer. En ese
año asumió el cargo de director del Instituto para la Investigación
Social, que
reconstruyó con Horkheimer. Revivieron la Escuela de Fráncfort de la Teoría crítica. Su filosofía continuó en la
línea de un análisis del racionalismo como instrumento a la vez de libertad y
de dominio, y de una crítica de la sociedad capitalista como restricción de las
formas de pensamiento y acción. En este período trabajará en la obra que verá
la luz en 1966: Dialéctica negativa.
Últimos años
La última década de su vida, la de 1960, la dedica
a la dirección del Instituto, a sus clases en la Universidad de Fráncfort, a la publicación de sus obras
y a una intensa relación con los artistas más vanguardistas del momento: en
literatura, Samuel
Beckett; en
música, John
Cage, en
cine, Michelangelo Antonioni (Adorno está presente,
aunque no físicamente, en La notte). Al morir, Adorno trabajaba en
su Teoría estética. Había realizado ya dos
versiones e iba a efectuar la última revisión del texto. Esta obra póstuma se
publicaría en 1970.
En estos años Adorno fue a la vez inspirador y
crítico de los movimientos juveniles de protesta, que muchas
veces encontraron inspiración en su particular visión del marxismo y del
rechazo a la razón como fin último. Cuando tras los sucesos del Mayo de 1968 en Francia Adorno criticó el
«accionismo» (el privilegio de la acción de protesta sobre la argumentación
crítica), fue objeto de distintas protestas estudiantiles, incluyendo la toma
de su aula. Durante el verano de 1969 Adorno decidió tomarse unas vacaciones
haciendo alpinismo en Suiza, donde padeció ataques de arritmia y palpitaciones. Ignorando el consejo de sus
médicos, partió a una excursión de la que no se recuperó, y falleció a los
pocos días, el 6 de agosto, debido a un infarto agudo de miocardio.
Pensamiento
Dialéctica de la Ilustración
Artículo
principal: Dialéctica de la Ilustración
Max Horkheimer (a la izquierda al frente), Theodor Adorno (a la derecha) y Jürgen Habermas (al fondo a la derecha, rascándose la cabeza) en 1964 en Heidelberg.
Fue escrita juntamente con Max Horkheimer durante el exilio en Los
Ángeles (EE. UU.), en 1944, y se publicó en 1947 en una pequeña editorial
de Ámsterdam, Querido Verlag. Hasta 1968 no apareció una reedición alemana que
hiciera asequible una obra que había ganado fama y era objeto de discusión y
debates. El objetivo teórico de la obra queda reflejado en su prólogo: «Lo que
nos habíamos propuesto era nada menos que comprender por qué la humanidad, en
lugar de entrar en un estado verdaderamente humano, se hunde en un nuevo género
de barbarie» (pág. 51). Para responder a la cuestión, en el primer capítulo de
la obra (titulado Concepto de ilustración) realizan un análisis del
concepto de razón tal como se ha fraguado y convertido en hegemónico en la
civilización occidental, llegando a la conclusión de que en él participan por
igual las ideas de «liberación» y de «dominación».
Dialéctica negativa
Dialéctica negativa (Negative Dialektik)
fue publicada en 1966 por la editorial Suhrkamp de Fráncfort. En la primera
frase de la obra queda clara su relación filosófica con la historia de la
filosofía: «La formulación Dialéctica Negativa es un atentado contra la tradición»
(Prólogo). Pretende proseguir el tipo de filosofía inaugurado por Hegel en una situación
diferente: el movimiento dialéctico del pensamiento no termina en una síntesis
superior de los opuestos, sino que deja las contradicciones con toda su crudeza
en la realidad.
Indisolubilidad del “Algo”
La filosofía de Adorno toma el camino del análisis
de la razón. Para el filósofo alemán esta es una cuestión importante que tiene
que plantearse la filosofía en su reflexión. Si bien la ontología occidental es
tendente a concebir la totalidad, a pensarla, Adorno expone que todo pensar,
incluido el ser, tiene que estar basado en alguna cosa, en “algo”. Esto es
importante ya que no podemos eliminar el pensamiento abstracto que se crea a
partir de algo y que es totalmente diferente a la realidad, esto es, producimos
abstracción. De un objeto en el pensamiento podemos suponer todo un corpus
abstracto que parte desde el mismo objeto y lo hace infinito en el pensamiento.
En esta línea critica al Idealismo desde Fichte, por “creer que el proceso de
la abstracción libera de aquello de lo que abstrae, y es que, aunque lo elimine
del pensamiento, lo destierra de su país natal, no lo aniquila en sí mismo”. El
pensamiento no puede de ninguna de las maneras separarse de lo pensado, y esto,
en muchos casos, entra en contradicción con el mundo, siendo la dialéctica la
forma de comprender esa contradicción. El punto de partida de la dialéctica
reside precisamente en aquella crítica que hacemos de la propia razón cuando
nos sobrevienen las contradicciones.
Obras
Entre sus contribuciones más destacadas a la
filosofía, puede señalarse la ya mencionada Dialéctica de la Ilustración, en colaboración con Horkheimer, obra cuyo núcleo fundamental es la crítica al
proyecto ilustrado concebido como dominio de la naturaleza. De acuerdo con
dicha tesis, los excesos de la razón dominadora han acabado dando una prioridad
absoluta a la razón instrumental, es decir, a una razón que se aplica a los
medios (la tecnología, el entramado industrial, la sociedad administrada
-verwaltete Welt-, etc.), pero que ha perdido completamente de vista los fines
esenciales que ha de perseguir el ser humano y a los cuales debería estar
subordinada la tan ensalzada razón. En esta obra introducen el concepto de
"industria cultural" con el que definen la progresiva valorización
y mercantilización de la cultura. Cuando la
razón instrumental se aplica a la producción en serie de la cultura, ésta se
banaliza y torna un instrumento que perpetúa la ideología del modelo de
producción dominante.
Otra de las obras fundamentales de Adorno es Dialéctica
negativa, que puede considerarse el buque insignia de todo su proyecto
filosófico. Lo que él propone como dialéctica negativa es una forma de
dialéctica que trata de salirse del esquema hegeliano clásico, el esquema de
diálogo entre opuestos que acaba en una síntesis reconciliadora, para hacer
hincapié en aquellos aspectos negativos, en los flecos sueltos de la historia,
en lo que no tiene nombre, en el desfavorecido... Con ello ya no estamos ante
una dialéctica tradicional y hasta cierto punto neutra, sino que se apunta
claramente hacia un lado determinado de la balanza; sobre todo, pretende
desmarcarse de los planteamientos cerrados de la tesis y su antítesis, con lo
cual, muy en la vía ya marcada por su colega Walter Benjamin se apela a un cierto nivel
de trascendencia, que se sitúa en el margen de la cadena lógica de la
dialéctica tradicionalmente considerada.
Su última gran obra es Teoría
Estética, que dejó inacabada y fue publicada un año después de su
muerte. En ella, Adorno ofrece una constelación de problemas, ideas y conceptos
que reflexionan sobre la estética, pero sin cerrarla nunca en un sistema, es
decir, mostrando una vez más su concepción de una filosofía finita, abierta,
que se niega a cerrarse en un sistema dogmático. Así, reencontramos la misma
idea de negatividad propia de sus obras anteriores, pero esta vez aplicada al
arte. La obra aborda cuestiones como el arte contemporáneo, los vínculos entre
arte y filosofía, las relaciones entre ética y estética, y el papel del arte
comprometido. También dedica un capítulo a la estética de la naturaleza, un
tema que había sido fundamental para la estética del siglo xviii, pero que posteriormente, a raíz
de la tesis hegeliana de que la estética debía reducirse a filosofía del arte,
había quedado sumido en un cierto olvido. Hoy se considera a Adorno uno de los
autores que reintrodujeron de nuevo la estética de la naturaleza en la
filosofía. Su visión de la estética de la naturaleza está, además, marcada por
una pionera sensibilidad ecologista.
Obras de Theodor W. Adorno
En cuanto a
su interés por la musicología, tuvo gran importancia su relación con la
vanguardia musical vienesa (Arnold
Schönberg, Eduard
Steuermann y Alban
Berg, de quien
fue alumno). Las consideraciones sociológico-musicales que desarrolló, sobre
todo en la Filosofía de la nueva música (1949), en Versuch
über Wagner (1952), en Disonancias. Música de un mundo
administrado (1956), en Mahler (1960) y en Der
gertreue Korrepetitor (1963) constituyen una parte sustancial de su
obra teórica.
El
mismo Thomas
Mann se
valió del asesoramiento del "consejero secreto" Adorno para la parte
musicológica de su novela El doctor Fausto (1947), que
sintoniza sustancialmente con las tesis de la Filosofía de la nueva
música, en la que al intérprete de la infracción sistemática de la
tradición y de lo convencional (Mahler) se le contrapone Stravinsky, es decir,
el intérprete (como Paul
Hindemith y Wagner) del retorno a lo arcaico, lo
ingenuo y lo naturalista, con gran riesgo de falsificación.
Valorando
la disonancia frente al oído convencional, Theodor Adorno se propone observar
el potencial utópico que ésta introduce, ya que, a su juicio, la música también
expresa las contradicciones de la sociedad, llevando a la crisis el estatuto de
lo existente y convirtiéndose así, como cualquier otro arte, en una protesta
contra la falta de libertad y una tendencia hacia un futuro diferente.
En el plano
filosófico y sociológico los dos temas principales de la reflexión crítica de
Adorno son, por una parte, la despiadada lucidez frente a las tendencias
predominantes en la realidad moderna y, por la otra, la tensión utópica hacia
una dimensión "otra" del presente cosificado y alienado, aunque la
rehúsa y la declara imposible. Como consecuencia de una formación
dialéctico-hegeliana que atesora el magisterio del marxismo, Adorno confirma la importancia
de la "negación" como instrumento de crítica de la sociedad.
En la Dialéctica
de la Ilustración, que ofrece una radiografía de la moderna sociedad de
masas obtenida directamente de la estadounidense de la inmediata posguerra, ya
se diseña el horizonte del hombre contemporáneo envilecido por la
"industria cultural", con sus falaces libertades, y por el mito de la
racionalidad científica que, desde sus remotos orígenes en la Ilustración
dieciochesca, se entrelaza con el dominio, y cuya función liberadora resulta
sofocada cada vez por un totalitarismo más o menos explícito. De aquí su
constante polémica con el pensamiento instrumental, con el culto a la exactitud
y con cualquier forma de historicismo progresista.
Estos temas
se desarrollan, además de en la summa filosófica que
constituye la Dialéctica de la Ilustración, en el fascinante
collage de aforismos titulado Mínima moralia (1951), en el
ensayo sociológico La personalidad autoritaria (1950), en su
monumental Dialéctica negativa (1966) y en Stichworte.
Kritische Modelle (1969).
En el plano
filosófico, junto a la relectura de Hegel en los Tres
estudios sobre Hegel (1963), a quien habría que atribuir el mérito de
haber abandonado el intelectualismo abstracto de la Ilustración sin rehuir por
ello la idealización de la razón dialéctica, la intervención de Adorno se
caracteriza por un repudio de la fenomenología, a la que, en el discutido
ensayo sobre Edmund
Husserl titulado Zur
Metakritik der Erkenntnistheorie (1968), acusa de abstracción y
distanciamiento de las contradicciones histórico-sociales, así como de una
sospecha constante hacia el irracionalismo, en cuyo ámbito hay que colocar la
misma ontología de Heidegger (Jargon der
Eigentlichkeit, 1964).
La función
dialéctico-negativa, inspirada al principio por el rechazo de lo que es en
nombre de lo que todavía no es, apoya también la crítica adorniana de la
cultura y sus intervenciones a propósito de la literatura, recogidas
principalmente en Prismas. Crítica cultural y social (1955) y
en los cuatro volúmenes de Notas de literatura (1958 y 1974).
Poco antes de morir, Adorno terminó una Teoría estética (publicada
póstumamente en 1970), en la que reafirmó una vez más la urgencia, para el arte
mismo, del nexo entre crítica y utopía. El arte sólo puede justificarse como
recuerdo de los sufrimientos que se han acumulado en el transcurso de la
historia, los cuales exigen un rescate de la vida "ofendida" y un
acto de reparación respecto a ella, en virtud de un futuro cualitativamente
diferente.
Si bien el
particular tipo de análisis que ha adoptado el pensador alemán no facilita una
distinción clara de los campos que estudia, algunas de sus obras se incluyen
con todo derecho en el campo específico de los estudios sociológicos. Durante
su exilio en Estados Unidos, Adorno colaboró con Frenkel-Brunswik, Levinson y
Sanford en una investigación fundamental sobre la psicología del
antisemitismo, La personalidad autoritaria (1950).
En esta
obra la contribución de Adorno se despliega no sólo en una sección dedicada al
material de la entrevista, sino también en la conocidísima elaboración de las
escalas de medida de las tendencias fascistoides potencialmente presentes
incluso entre los miembros de sociedades democráticas como la estadounidense,
actitudes ligadas al prejuicio y a la adhesión a modelos de comportamiento
estereotipados y conformistas.
La crítica
de la sociología positivista (que Adorno identifica casi totalmente con la de
Estados Unidos) dejó su sello en Sociológica (1956), redactada
en colaboración con Max Horkheimer; para Theodor Adorno, esta sociología, en
cuanto ligada al detalle, pierde de vista la realidad social, lo que priva a
esta disciplina de una orientación racional que esté centrada en las
necesidades primarias de la existencia. En sus Soziologische Schriften (1972),
Adorno insiste en la importancia de aplicar el método dialéctico al
conocimiento de la sociedad contemporánea como el único capaz de escapar a la
imagen petrificada que ésta ofrece de sí misma. Otra obra de interés
sociológico es Sociología de la música (1962), y cabe citar
también Impromptus.
VIDEOS CORTOS SOBRE ADORNO Y SU PENSAMIENTO
NEGATIVO
https://www.youtube.com/watch?v=L6-0_zdatIw
Filosofía #Adorno Muy breve exposición del pensamiento de
Theodor Adorno.
https://www.youtube.com/watch?v=4YGnPgtWhsw
Theodor
Adorno (y Horkheimer) - Escuela de Frankfurt y ...
https://www.youtube.com/watch?v=rpceCopdmC4
En este vídeo ponemos en contexto la filosofía de Adorno para
poder comprender las claves de su pensamiento y en qué consiste su
dialéctica ...
LA COLECCIÓN DE DESCUBRIR FILOSOFÍA CON ADORNO Y SU
PENDAMIENTO NEGATIVO EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX DE MARIO FARINA.
RECOMENDABLE.
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Uno de los
pioneros de la crítica sociocultural fue Theodore Adorno, ficha clave de la
Escuela de Fráncfort. Su teoría, basada en un modelo que funciona como una
constelación, brilla en la entrega 45 de Descubrir la Filosofía.
Firmaba
como ‘Teddie’ las cartas a sus colegas más cercanos, incluidos el “Lieber Herr
Benjamin” (Estimado señor Benjamin”, refiriéndonos a la carta con fecha 4 de
marzo de 1934 remitida a su gran amigo y aliado en la escuela de Fráncfort,
Walter Benjamin), le injertó marxismo y mesianismo al judaísmo —siendo el
segundo, el más importante ingrediente de su plan de acción, o constelación’— y
se empecinó en desentrañar las redes ocultas de los organismos de control
social, más allá de los ‘normalizados’ gobiernos y las doctrinas religiosas, en
especial, criticando sagazmente el germen capitalista occidental.
Ello,
facilitado por un linaje, por un lado, tan burgués y judío (legado paterno, un
comerciante de vinos de origen judío, Oscar Alexander Wiesergrund, quien se
convirtió al protestantismo) como ciertamente elitista o aristocrático de
su madre, María Calvelli-Adorno della Piana, una pianista y cantante lírica
italo-corsa de raíces mediterráneas y de quien el joven Theodore prefirió tomar
su apellido (de su padre, solo incluyo la inicial del mismo).
Sin duda,
antes que crítico de la sociedad burguesa occidental o filósofo social, Adorno
fue un apasionado y gran conocedor de la cultura. “El ambiente
familiar burgués en el que creció se caracterizaba por un clima cultural y
artístico muy estimulante. Los conocimientos de la madre tendrían no poca
influencia en la pasión y la competencia musicales de Adorno, que llegaría
incluso a ponerse a prueba —sin convertirse, no obstante, en un verdadero
profesional— en la composición de fragmentos dodecafónicos” recuerda
Mario Farina en Adorno. Teoría crítica y pensamiento negativo, tomo 45 de
Descubrir la Filosofía.
Una constelación de influencias
El contexto
de la República de Weimar marcó el devenir profesional de Adorno. Si bien fue
un ambiente enmarcado por la agitación y la oposición violenta, el entonces
alumno de bachillerato recibió influencias de todo tipo y provenientes de la
escuela marxista, la fenomenología de Husserl, el psicoanálisis, el
historicismo de Dilthey, el neokantismo, la filosofía de la vida de Simmel, el
expresionismo literario, la tendencia neorromántica del poeta Stefan George, el
misticismo goetheano de Rudolf Steiner, el pensamiento irracionalista de Ludwig
Klages, etc.
A todas
estas herencias, hizo sus oídos sordos, pues su olfato crítico seguía la estela
hegeliana según la cual, la filosofía es la propia época captada en ideas,
tarea nada sencilla pues le significaba saldar cuentas con este panorama
complejo, para lo cual supo sacarle provecho a su estrecha amistad —que no
tardó en convertirse en una profunda influencia recíproca— con Siegfried
Kracauer, sociólogo y filósofo a quien conoció cuando recién se tituló
bachiller y empezó a frecuentar las escenas cultural e intelectual
francfortiana. De él, aprehendió el método interpretativo y de estudio basado
en la idea —alineada con su hegelianismo innato— de que la filosofía constituye
una forma de razonamiento por medio del cual el autor expresa conceptualmente
su propio tiempo.
Pero el
hecho trascendental en la vida y obra de este filósofo lo marcó el momento en
que conoció a Walter Benjamin, cuyo origen judío y fuerte interés por dotar del
espíritu mesiánico hebreo a la filosofía marxista y materialista fue casi una
firma de cooperación mutua. Inclusive, de su aproximación al espíritu de la
época (zeitgeist), nació el modelo crítico de Adorno, usualmente comparado a la
estructura de una constelación.
“Al
desastre europeo inmediatamente posterior a la Primera Guerra Mundial, a la
crisis y al tumulto cultural de la República de Weimar había que responder con
un pensamiento dotado de un objetivo revolucionario y social, sí, pero capaz de
observar el mundo con las luces de la redención mesiánica”, escribe Mario
Farina en Adorno.
Y añade:
“Si el mundo y la realidad aparecen desgarrados y fragmentados, hay que
encontrar un pensamiento capaz de aunar las cosas. Pero este pensamiento no
puede tener la forma de la unificación violenta, de la recuperación de una
presunta unidad y homogeneidad arcaica y originaria, como el que en aquellos
años presentaba el fascismo en Italia. Es preciso encontrar un modo de reunir
los fragmentos y los escombros, pero sin suprimir sus diferencias recíprocas
(…) Una estrella sigue siendo para siempre una estrella, su pertenencia a la
constelación no modifica su naturaleza”.
Adorno, en regla de tres
Si bien son
innumerables los aportes de la filosofía del filósofo alemán —todos aún
vigentes a niveles cultural, social, político y económico—, su desarrollo
conceptual podría resumirse en tres grandes puntos.
1.
Dialéctica de la Ilustración. Además de ser el título de su obra más importante
(una coautoría con Horkheimer), es el core de su pensamiento y que no se limita
a la época en la que la ciencia y el conocimiento fueron motores del
desarrollo. Para los alemanes, la palabra ilustración refiere al
esclarecimiento de la verdad.
2. Teoría
Crítica (negativa). Ligado al anterior, este punto de la filosofía de Adorno
propone ‘burlarse de la lógica cuando está en contra de la humanidad’,
acudiendo a la ilustración como la vía para respetar sin violencia aquello que
se quiere conocer y sin imponer el pensamiento a los objetos que se piensan.
“Crear constelaciones, pensar por fragmentos.
Tal es el
núcleo del pensamiento crítico, un pensamiento que, en la última fase de su
vida, el propio Adorno definiría como ‘negativo’, es decir, falto de cualquier
imposición positiva”, explica Farina.
3. Sociedad
burguesa occidental. fue el objetivo de la primera generación de la Escuela de
Francfort, a cuya integración aportaron las ideas de Walter Benjamin, Marcuse,
Fromm, Adorno, su coequipero Horkheimer y otras mentes brillantes de la época
que se adhirieron al Instituto de Investigación Social (Institut für
Sozialforschung, fundado en y dirigido por Adorno entre 1020 Y 1930, sucedido
por Horkheimer, marcando la primera generación de la Escuela de Fráncfort),
desde el que formularon sus críticas a la sociedad burguesa occidental bajo el
mando de la investigación crítica de Kant, Hegel, Marx, Nietzsche y Freud.
Obras en español
·
Sobre la metacrítica de la teoría del conocimiento. Estudios sobre
Husserl y las antinomias fenomenológicas (Traducción de León Mames) (Monte Ávila Editores,
1970; Ediciones Planeta-Agostini,1986).
·
Educación para la emancipación (Editorial Morata, 2002).
·
Consignas (Amorrortu,
2003).
·
Notas sobre literatura (Ediciones Akal, 2003).
·
Filosofía de la nueva música (Ediciones Akal, 2003).
·
Beethoven. Filosofía de la música (Ediciones Akal, 2003).
·
Minima
Moralia.
Reflexiones desde la vida dañada (Primera edición en español: Monte Ávila Editores, Caracas, 1975, 271 p.
Traducción de Norberto Silvetti Paz) (Ediciones Akal, 2004).
·
Escritos sociológicos I (Ediciones Akal, 2005).
·
Teoría estética (Ediciones Akal, 2005).
·
Dialéctica negativa. La jerga de la autenticidad (Ediciones Akal, 2005).
·
Kierkegaard. La construcción de lo estético (Ediciones Akal, 2006).
·
Dialéctica de la Ilustración (Ediciones Akal, 2007).
·
Composición para el cine. El fiel correpetidor (Ediciones Akal, 2007).
·
Escritos musicales I-III (Ediciones Akal, 2006).
·
Escritos musicales IV (Ediciones Akal, 2008).
·
Sueños (Ediciones
Akal, 2008).
·
Monografías musicales (Ediciones Akal, 2008).
·
Crítica de la cultura y sociedad I (Ediciones Akal, 2008).
·
Crítica de la cultura y sociedad II (Ediciones Akal, 2009).
·
Disonancias. Introducción a la sociología de la música (Ediciones Akal, 2009).
·
Escritos sociológicos II. Volumen 1 (Ediciones Akal, 2009).
·
Miscelánea I (Ediciones
Akal, 2010).
·
Escritos filosóficos tempranos (Ediciones Akal, 2010).
Obras
musicales
·
Seis estudios para
cuarteto de cuerdas (1920)
·
Cuarteto de cuerdas (1921)
·
Dos piezas para
cuarteto de cuerdas (1924/25)
Interpretadas en el álbum Theodor W.
Adorno/ Hanns Eisler. Works for String Quartet (CPO,
1996), a cargo del Leipiziger Streichquartett.6
·
‘Für
Sebastian Wedler’ (1919)
Discografía seleccionada
·
Adorno: Kompositionen /
Compositions (Two Pieces for String Quartet, etc.) by Theodor Adorno, Gary
Bertini, Hans Michael Beuerle and Buchberger-Quartett Frankfurt (1993)
·
Works for String Quartet by
Theodor Adorno, Hanns Eisler and Leipziger Stringquartet (1996)
·
Theodor W. Adorno/Artur
Schnabel Chamber Music trio recherche by Melise Mellinger, Barbara Maurer,
Lucas Fels, Theodor W. Adorno and Artur Schnabel (2008)
·
Adorno: Kompositionen by
Theodor W. Adorno, Buchberger Quartet, Frankfurt Opera Orchestra, Gary Bertini
and Frankfurter Kammerchor
Véase
también
·
Bibliografía
·
Adorno,
Theodor Wiesengrund: Obra completa (20 volúmenes). Akal, Tres
Cantos (edición comenzada en 2003).
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