HABERMAS, LA APUESTA A LA DEMOCRACIA DELIBERATIVA

 

 

HABERMAS LA APUESTA POR LA DEMOCRACIA DELIBERATIVA

 

PREPARADO POR GM CAPAYPRY CON EQUIDAD SOCIAL DE FLORIDA URUGUAY

VER WEB www.gmcapaypry.site  BLOG SERIE FILOSOFÍA.

DICIEMBRE DE 2023

FUENTES: Colección Descubrir la Filosofía y otros





Durante una conferencia en la Escuela de Filosofía de Múnich en 2008

 

La palabra en español, no existe. Pero, el término ‘deliberacionista’ rune a la mayoría de ámbitos propios del pensamiento habermasiano, a saber, la democracia, la deliberación, la liberación y la lingüística, entre muchos otros.

No obstante, cualquier término resulta insuficiente para describir la teoría, aún activa, inacabada y en constante producción del gran representante de la segunda generación de la Escuela de Frankfurt.

 

 

Jürgen Habermas ha volcado más de seis décadas de trayectoria en la construcción de un proyecto filosófico político; y es que no podría ser diferente, si se tiene en cuenta que el contexto en el cual se ha desarrollado ha estado marcado por el ascenso del nacionalsocialismo y su consecuente Segunda Guerra Mundial, la posguerra alemana, la Guerra Fría, la demolición del Muro de Berlín, la reunificación de su territorio en 1989 y, casi de inmediato, la inminencia de un modelo neoliberal en plena época de globalización económica y geopolítica.

Ello sin contar una Gran Depresión económica y una crisis financiera mundial más reciente. De ahí, su interés por fusionar a las ciencias sociales con la reflexión filosófica.

(Lea además: Pascal, ni ángel ni bestia)

Y para ello, el nacido en Düsseldorf (Alemania), en 18 de junio 1929, hoy con 94 años, tenía un labio leporino, por ellos tenía un complejo, se dice por eso se dedicó al estudio en general y en especial a la filosofía, se ha valido de su inspiración en las dos corrientes idealistas alemanas, como fueron la de Hegel (por consigue de la de Marx por más que no fue un teórico marxista) y la de Kant, en aras de la actualización de la tradición mediante la conciencia lingüística, siendo esta última entendida ‘a lo habermasiano’ como una de sus vías de conexión de la teoría con la praxis, con esos llamados a la acción que encarnan la ética, la política y el derecho (la triada clave de su tesis filosófico-política en tanto constituye la dimensión normativa que debe guiar la acción humana).


“Mediando entre la teoría y la práctica, no ha dejado de nutrirse de los avances en ciencias sociales, así como de revisa, en especial, la tradición sociológica a partir de sus orígenes en Marx, Durkheim y Weber
Sus propuestas impulsan la radicalización del ideal democrático en debate con el liberalismo, el comunitarismo o el multiculturalismo. Destaca en su proyecto filosófico político, la defensa de Europa y del cosmopolitismo y su apuesta por los derechos humanos”, escribe sobre la imposibilidad de entender la filosofía de la segunda mitad del siglo XX sin abordar a Habermas, María José Guerra Palmero, en su obra 'Habermas: la apuesta por la democracia', entrega número 35 de la colección 'Descubrir la Filosofía'.

 

FILOSOFÍA DE HARBERMAS, ABORDAJE.

1.       Crítica a la razón práctica

2.       Concepción de la racionalidad.

3.       Concepción De la moralidad.

4.       Concepción De su ética discursiva

5.       Terminamos hablando de la política según Habermas

Teoría critica

1.       Aversión a sistema teóricos cerrados

2.       Interesado en influir en contexto social a través de la filosofía.

3.       Desea comprender la situación histórico cultural de la sociedad.

4.       Desean convertirse en una fuerza transformadora en medio de las luchas y contradicciones sociales. PARA QUE EXISTA LA RECONLIACIÓN Y LA PAZ SOCIAL.

Habermas se preocupa por los temas de su tiempo que son:

·         Bombas nucleares. Etapa de la guerra fría.

·         Reelaboración de la historia del nazismo. No esta de acuerdo con los revisionismos que dicen que hay cosas malas y buenas del nazismo.

·         Reunificación alemana. El apoyo, pero no quiere una Alemania pobre que viene del comunismo y un Alemania rica del capitalismo, sino que debe haber un equilibrio.

·         Guerra de Irak. La critico siempre.

·         Inmigración. Aboga por la integración

·         Unión Europea. Una constitución de ética de mínimo que recoja todas las opciones y no solo basada en enfoque del neoliberalismo capitalista exclusivamente.

·         Bioética. 



En algunas de sus obras posteriores, Habermas tratará de reconstruir el materialismo histórico en el contexto de las nuevas problemáticas de las sociedades del capitalismo tardío. En este sentido, la gran crítica que realizará a Karl Marx será que este, en su opinión, reduce la praxis humana a una techné, en el sentido de que Marx le otorga la importancia fundamental al trabajo como eje de la sociedad, en demérito del otro componente de la praxis humana que Habermas rescata como esencial: la interacción mediada por el lenguaje.

Karl Marx

A diferencia de Marx, Habermas entiende que el cambio social debe darse también en un ámbito simbólico, en el ámbito de la comunicación y el entendimiento entre los sujetos. De ahí, Habermas repensará la distinción entre trabajo - enfocado racionalmente a una finalidad - e interacción como dos momentos irreductibles de la acción, y tratará de incluir en la labor productiva (el trabajo) componentes de la interacción comunicativa. De este modo, Habermas toma distancia de los planteamientos de Theodor Adorno y Max Horkheimer, sus profesores en la ESCUELA DE FRANCFORT, que se encontraban aún situados en el paradigma de la filosofía de la conciencia, y desarrolla un concepto de razón basado en las estructuras de una intersubjetividad que se transmite mediante el lenguaje.

 

Max Horkheimer y Theodor Adorno en primera fila. Detrás, el primero a la derecha, Jürgen Habermas. Heidelberg, 1965

Escuela de Francfort

 

A partir de este planteamiento, Habermas se propuso la ingente tarea de construir una teoría de la racionalidad humana por medio del análisis de las precondiciones universales de la comunicación, labor que dio como resultado la teoría de la acción comunicativa, con base en la teoría social de Weber y Parsons, así como en filosofía del lenguaje, no imponer una ley, sino proponer una teoría con aspiración universal.

A partir de la publicación en 1981 de su obra fundamental, la Teoría de la acción comunicativa, sus análisis y reflexiones se han orientado hacia la fundamentación de la ética discursiva, la defensa de la democracia deliberativa, que, es un complemento de la democracia representativa y de los principios del Estado de derecho, así como hacia las bases normativas requeridas para configurar una esfera pública trasnacional.

 

DEMÓCRATA DE LA PALABRA.

 

Jürgen Habermas, en Descubrir la filosofía.

 

Al ser su ideal moderno político, ético y civilizatorio, Jürgen Habermas ha dedicado su estudio del pensamiento a su defensa. Y para ello, se ha valido de la palabra, del discurso o la deliberación, como aquel acto de confrontación de los mejores argumentos de las partes implicadas con miras al consenso.

(Lea también: 
Maquiavelo, el creador de las ciencias políticas).

De este modo, el motor sobre el cual el alemán montó su apuesta teórico-práctica fueron la polémica y la controversia.

Más allá de pretender encender la hoguera de las discusiones acaloradas o los conflictos, Habermas ha visto en ellas las herramientas claves para hacer uso público de la razón y para afianzar la inclusión democrática.

¿Por qué? Precisamente, porque el debate posibilita la creación de espacios y momentos de deliberación realmente igualitarios, es decir, que sean accesibles a todos los afectados e implicados, que ellos se sientan representados y partícipes del sistema al cual no solo hacen parte, sino que le dan vida.

 

 

DE LA PLAZA PUBLICA A LA DEMOCRACIA DELIBERATIVA.

 

Para comprender el proyecto filosófico político de Habermas, y trascenderlo de una simple concepción idealista y aún romántica de una democracia cosmopolita, Guerra analiza cuatro grandes temas que se erigieron en los puntos cardinales para la por el filósofo alemán:

1. La esfera pública.

Teorizar en torno a las maneras de diversificar el acceso a un proyecto democrático llevó al filósofo a estudiar, desde la raíz, los escenarios de participación que se han abierto (o luchado) a lo largo de la historia.

Este completo seguimiento ocupó una de las primeras producciones de Habermas, 'Historia y crítica de la opinión pública: la transformación estructural de la vida pública' (1962), cuya importancia se debió a su gran riqueza de información detallada en torno a los orígenes históricos burgueses de aquellos escenarios en los que se desarrolló y se sigue desarrollando la política: la esfera pública.


JOVEN HABERMAS


“En su reconstrucción histórica —apunta Guerra— del devenir de la esfera pública durante los siglos XVIII, XIX y XX, Habermas analiza sus distintas fases. Historia y crítica sirve de relato fundacional con el objetivo de avalar la posibilidad misma de lo que luego, muchos años después, Habermas denominará ‘democracia deliberativa’”

 

2. Razón y sociedad

Con la publicación de su obra de 1981 'Teoría de la acción comunicativa', Habermas ratificó el cambio de paradigma en el cual la filosofía del lenguaje marcaría el paso, fue expresado en las décadas del 80 y 90 por corrientes sociológicas, plantea el ser humano como ser social por naturaleza y busca comunicarse, su objetivo es “ el estudio de la comunicación como sistema indispensable”,  postulado: el mundo de la vida, sistema y acción comunicativa, pero con EXPOSICIÓN Y ENTENDIMIENTO ARGUMENTAL,  RESULTADO DE LA RAZÓN COMUNICATIVA, NO ES LA RAZÓN INSTRUMENTAL, por eso en una democracia debe existir los espacios para una deliberación igualitaria para todos, y el gran responsable es la mayoría elegida, (siguiendo el ritmo del llamado ‘giro lingüístico’), al igual que lo haría la inspiración en la democracia radical del pragmatismo norteamericano, el cual le fue dado a conocer a Jürgen por el neokantiano Karl-Otto Apel.




LA TEORIA DE LA ACCION COMUNICATIVA Y LA ACCION ESTRATÉGIA UNA ENCUBIERTA Y OTRO ABIERTA, QUE DEFIENDE HABERMAS

 

LA PALABRA Y EL LENGUAJE

3. Giro lingüístico

Se trata de una expresión acuñada por Gustav Bergmann en 1953 para señalar el protagonismo adquirido por el lenguaje en la obra de Ludwing Wittgenstein, en especial en 'Tractatus lógico philosophicus', como en 'Las investigaciones filosóficas', en la cual aparece la expresión ‘juegos del lenguaje’ para designar los diferentes usos sociales de este.

(Además: 
Noam Chomsky, la leyenda viva de la filosofía).


Chomsky


Precisamente, el estudio del lenguaje y de sus usos es lo que se conoce como pragmática “que se convierte en el objeto de estudio privilegiado en el siglo XX. Prácticamente toda la filosofía queda afectada por este enfoque a partir de la segunda mitad de la centuria”, señala la autora de 'Habermas: la apuesta por la democracia'.

4. Democracia deliberativa

Fue el planteamiento habermasiano a partir de 1990, como método de solución de las confrontaciones entre los modelos liberales y republicanos de democracia. De este modo, el filósofo alemán propuso su modelo deliberativo que incorporaba las fortalezas de cada uno, pero dándole prioridad a las prácticas democráticas, a la participación y a la deliberación.



Este modelo de democracia deliberativa se caracterizó, a su vez, por incluir una ética de discurso que, entre otros puntos, incluyó características como el procedimentalismo democrático (llegar a consensos a través del proceso argumentativo de fundamentación de normas), el deontologismo (determinar principios y normas morales que guíen nuestro comportamiento), el cognitivismo (optar por la validez moral indicada por el consenso racional ) y el universalismo, o ese grado de generalización de las normas (y que debe ser el máximo posible).





(Puede leer: 
‘Mi propósito es escribir una crónica íntima de la vida cubana contemporánea’).

En consecuencia, Habermas elaboró una teoría del derecho que, vinculada con la ética del discurso, culmina con la propuesta de una política deliberativa. Ética, política y derecho se articulan en un continuo normativo. Habermas le confiere al derecho una función mediadora entre los hechos de la economía y de la política y la validez normativa de la moral empeñada en señalar lo justo”, puntualiza María José Guerra Palmero.

 

IDEOLOGÍAS POLÍTICAS EN LA CULTURA DE MASAS

28 JULIO, 2018




Los influyentes en Habermas y sus posiciones críticas posteriores

 

Varios libros analizan la cultura del siglo XX en relación con las ideologías que la promovieron

 

La cultura es siempre portadora de valores ideológicos, ya sea de una manera explícita o implícita. En algunos casos se trata de obras directamente propagandísticas que no sólo no encubren su ideología, sino que la manifiestan expresamente para conseguir mayor difusión. En otros la ideología sólo se percibe a partir de la lectura simbólica de un producto cultural cuyo envoltorio es el entretenimiento. Una interpretación extrema es la que atribuye a todos los productos culturales, incluso a los más inocentes, una intencionalidad ideológica al considerar que el entretenimiento impide que los receptores piensen en los asuntos que realmente interesan. Se trataría de transmitir la ideología dominante a través de la cultura utilizando los medios de comunicación, con el fin de conseguir un mayor control social. Herbert Schiller afirma en “Manipuladores de cerebros” que los medio construyen una imagen de la sociedad que no responde a la realidad pero que presentan como un fiel reflejo de la misma, con lo que las personas buscan adecuar sus conductas a esa imagen. En todos estos casos es en la cultura de masas donde la ideología tiene una mayor presencia. Un libro reciente, “Ideologías políticas en la cultura de masas” (Tecnos), coordinado por varios profesores universitarios, aborda los contenidos ideológicos en productos culturales como el cine, el comic, la música pop, los best-sellers o la televisión.

EL CINE COMO VEHICULODE IDEOLOGÍA

De todos los productos culturales es el cine el que tiene un mayor impacto sobre la sociedad. En el cine, además, el discurso indirecto es más persuasivo que el directo. Los autores son conscientes de esta cualidad y dedican la mayor parte de su estudio a analizar los contenidos ideológicos de este medio, desde las producciones pioneras del cine fascista de Leni Riefenstahl, que exaltaba los valores de Hitler y el nacionalsocialismo; el cine comunista de Eisenstein y el supremacista de Griffith, hasta las actuales películas imperialistas del ciclo Rambo, las del compromiso socialista del cineasta finlandés Aki Kaurismaki o las del neoliberalismo conservador de “La rebelión de Atlas”, el ciclo de películas basado en el best seller de Ayn Rand “Atlas Shrugged”. Los valores del ecologismo se estudian a través del análisis de la película “La selva esmeralda”.

El libro aborda también los mecanismos de transmisión ideológica de otros productos culturales, como el liberalismo progresista en el comic de la serie Capitán América, donde se critican los excesos del capitalismo y la libertad de mercado; la transmisión de la ideología comunista y los modelos de comportamiento de los ciudadanos de la sociedad soviética en la literatura juvenil de Arkadi Gaidar; el discurso anarquista en la música y las letras de los grupos punk españoles Eskorbuto y Aviador Dro.

Del medio televisión se estudian los mensajes feministas de la serie “House of Cards” y el nacionalismo en “The Newsrooms” y “Americans”. Y en internet, el fenómeno del fundamentalismo religioso evangélico a través de las redes sociales y las grabaciones en You Tube del peruano “El niño predicador”, cuyos mensajes en defensa del creacionismo y la condena al darwinismo, la homosexualidad, el aborto o el divorcio han creado una importante corriente de seguidores de un fenómeno a tener en cuenta.

Quienes mejor han estudiado los contenidos ideológicos en la cultura de masas fueron los filósofos de la Escuela de Frankfurt, que utilizaron el vocablo seudocultura para definir aquellos productos culturales convertidos en mercancía y sometidos a las leyes del mercado.

LA ESCUELA DE FRANKFURT Y LA CULTURA

Durante los años de la República de Weimar en Alemania, en vísperas de la llegada de Hitler al poder, un grupo de filósofos fundó en la ciudad de Frankfurt el Instituto de Investigación Social, dedicado fundamentalmente al estudio del marxismo y de sus repercusiones políticas y sociales. Su obra ha quedado para la posteridad como uno de los análisis más lúcidos sobre los problemas de la sociedad capitalista y la cultura del siglo XX.

Max Horkheimer, Theodor Adorno, Walter Benjamin, Herbert Marcuse, Leo Löwenthal, Félix Weil, Gershom Scholem, Eric Fromm, Friedrich Pollock… fueron los fundadores de lo que se conoce como la Escuela de Frankfurt (la ciudad de Frankfurt era entonces uno de los más activos focos culturales de Europa), cuyo pensamiento tuvo continuidad en una nueva generación a la que pertenecen Jurgen Habermas, Claus Offe y Axel Honneth. Sus críticos los acusaban de elaborar propuestas teóricas sin implicarse en la acción práctica para desarrollarlas. En este sentido György Lukács decía que estaban alojados en un hotel con vistas a un abismo vacío. Esta definición fue adoptada por Stuart Jeffries para titular su libro “Gran Hotel Abismo. Biografía coral de la Escuela de Frankfurt”, recientemente editado por Turner.

LA CULTURA DE MASAS Y EL MARXISMO

El Instituto nació sobre dos contradicciones. Por una parte, ideado para la crítica al capitalismo, su financiación corrió a cargo del padre de Félix Weil, que desembolsó fondos familiares para una institución que supuestamente iba a teorizar el derrumbe del sistema que lo había hecho rico. Por otra parte, sus fundadores procedían de familias judías de la alta burguesía, que en un principio se rebelaron contra la clase social de sus padres. Benjamin denunció estas contradicciones: marxistas sin partido, socialistas dependientes del dinero del capital, beneficiarios de una sociedad contra la que luchaban.

Tras una primera etapa de ortodoxia marxista para el estudio del socialismo y el movimiento obrero, con la llegada de Horkheimer a la presidencia en 1930 el Instituto se transformó en un centro multidisciplinario abocado al revisionismo marxista y a incorporar los hallazgos del sicoanálisis de Freud a la crítica de los mecanismos del control ideológico del capitalismo, un neomarxismo considerado herético por la URSS, a la que en algún momento estos filósofos calificaron de dictadura disfrazada de democracia popular y definieron como una burocracia totalitaria que había distorsionado la filosofía de Marx.


Los filósofos de Frankfurt denunciaron la explotación del trabajo según el modelo fordista, que convertía a los seres humanos en máquinas y a la cultura y al arte en productos de consumo de masas, de modo que, mientras el capitalismo los controlaba durante las horas laborables, la industria cultural lo hacía en las horas de ocio. En otras palabras: existe una continuidad entre el tiempo de trabajo y el de ocio que a medida que las posiciones de la industria cultural se hacen más sólidas y estables más influyen sobre las necesidades del consumidor, dirigiéndolas y disciplinándolas. Así, la Teoría crítica (nombre con el que se conoce su filosofía) afirma que en el tiempo de ocio el consumidor de los productos de la industria cultural recibe el mensaje apologético de una sociedad alienante, un mensaje que no llega a percibir porque se oculta tras un esparcimiento de gratificación.


Para promover una cultura que formara parte de la revolución que iba a liberar las mentes de los oprimidos, estos pensadores estudiaron todas las manifestaciones de la cultura de masas, desde los horóscopos hasta la fotografía, el cine, la publicidad, la radio, la naciente televisión y la música de jazz, con el fin de negar el consumismo como forma de realización (compro, luego existo). Al contrario que Adorno, Benjamin tenía esperanzas en el potencial liberador y revolucionario de algunas manifestaciones de la nueva cultura como el jazz, la música grabada y el cine, y vio en la reproducción mecánica una forma de emancipación de la dependencia que la cultura tenía en relación con espacios de culto como museos o salas de conciertos, de acceso privilegiado para unos pocos. Los medios de comunicación serían los mejores instrumentos para divulgar esa nueva cultura en vez de promover los productos de la industria cultural.

EL FASCISMO Y LA PERSONALIDAD AUTORITARIA

El triunfo del nacionalsocialismo en 1933 aplastó la Escuela de Frankfurt hasta el punto de reducir a ruinas el edificio que albergaba sus instalaciones, y sus promotores tuvieron que abandonar el país.

Primero en Ginebra, más tarde en París y finalmente en la Universidad de Columbia en Nueva York, continuaron con sus investigaciones, que se orientaron entonces al estudio de las causas del fascismo y de la personalidad autoritaria en la ciudadanía alemana (lo que Fromm llamó el miedo a la libertad), que había propiciado la llegada de Hitler al poder. En “Dialéctica de la Ilustración” Adorno y Horkheimer quisieron demostrar que fue la razón (como en el cuadro de Goya “El sueño de la razón produce monstruos”) la que había conducido a Auschwitz: el nazismo, según los autores, afianzó el horror a través de una barbarie que había sido “racionalmente organizada”. En vez de progreso, resultó que la Ilustración había traído barbarie y violencia. Ahora la cultura de masas, a través de su fuerte capacidad de persuasión y manipulación, sería el proceso a través del cual se estaban transmitiendo los valores de un nuevo nacionalsocialismo: “Tanto la cultura de masas como la propaganda fascista -escribió Adorno- satisfacen y manipulan necesidades de dependencia promoviendo actitudes convencionales, conformistas y de satisfacción”.

Finalizada la guerra, en 1951 volvieron a Frankfurt algunos de los exiliados para continuar su labor (Horkheimer, Pollock, Adorno) mientras otros (Marcuse, Fromm) decidieron permanecer en los Estados Unidos. En los años sesenta, durante las movilizaciones contra la guerra del Vietnam y los acontecimientos del mayo del 68 en París, Berkeley y Berlín, Horkheimer y Marcuse se enfrentaron en relación con las actitudes de algunos movimientos estudiantiles a los que Horkheimer comparó con los totalitarismos nazi y comunista y Habermas llegó a calificar de “fascismos de izquierda” mientras Marcuse los defendía.

Los críticos de la Escuela de Frankfurt acusaron a sus filósofos de apuntalar el sistema que afirmaban combatir, lo que abocó a la Escuela a replantearse sus presupuestos. En este sentido la obra de Habermas sería la más representativa del periodo actual.

 

ALGO PECULIAR: EL ALUMNO DE HABERMAS PARA SU DOCTORADO EN FILOSOFÍA: HANS – HERMANN HOPPE

 

Hans-Hermann Hoppe (Peine, 2 de septiembre de 1949) es un filósofo político alemán paleolibertario y anarcocapitalista. Es profesor emérito de economía en la Universidad de Nevada en Las Vegas, miembro distinguido del Instituto Mises,1​ antiguo editor del Journal of Libertarian Studies, y fundador de la Property and Freedom Society.

 

 

Hoppe se caracteriza por una filosofía de la ciencia aplicada a la economía donde afirma la necesidad de las categorías apriorísticas para la construcción de cualquier teoría científica, lo que le lleva a afirmar la superioridad de la metodología económica racionalista de la escuela austriaca,3​ una ética —donde fundamenta apodícticamente la ética de no-agresión desde la teoría de la ética de la argumentación — a la economía aplicada — refutando el concepto de bienes públicos, pasando por la estrategia política y la apología al derecho privado como el único ético y económicamente eficiente.

Hoppe se identifica como un libertario culturalmente conservador. Ha expresado críticas hacia la democracia, afirmando que una monarquía preservaría la libertad individual de forma más eficaz. Las declaraciones e ideas de Hoppe sobre la raza y la homosexualidad han provocado repetidamente la controversia entre sus pares libertarios y sus colegas de la UNLV. Su creencia en el derecho de los propietarios a establecer comunidades libertarias que practiquen la discriminación racial, y su afirmación de que los homosexuales y los disidentes políticos tendrán que ser "expulsados físicamente" de estas comunidades si quieren sobrevivir, han resultado especialmente divisivas. Hoppe también suscita controversia por su apoyo a la aplicación gubernamental de las leyes de inmigración, lo que, se2gún los críticos, está en contradicción con el libertarismo y con lo que describen como "anarquismo libertario".

En la actualidad, Hoppe es profesor emérito de Economía en la Universidad de Nevada en Las Vegas, miembro distinguido del Instituto Ludwig von Mises, y, hasta diciembre de 2004, el editor del Journal of Libertarian Studies. Ha sido el autor de numerosos libros y artículos ampliamente discutidos. Hace uso de la ética de la argumentación para su defensa apriorística del derecho de auto posesión y propiedad privada, la cual se basa en las teorías de ética del discurso de los filósofos alemanes Jürgen Habermas (supervisor doctoral de Hoppe) y Karl-Otto Apel. En 2006, Hoppe fundó la Property and Freedom Society.

ESTA POSTURA, ¿NO LE PARECE CONOCIDA POR NUESTRA SUDAMÉRICA?

Es la misma del economista Javier Milei, hoy presidente de Argentina, luego de tener un apoyo publico abrumador en las elecciones, de una pésima gestión del anterior gobierno peronista – kirchnerista, el primer presidente anarco libertario del mundo, dicho propiamente por él.

Tal vez es lo que necesita Argentina hoy en su crisis monumental, es cierto que los outsider, muchas veces son los que aparecen en estas instancias, y para no ir muy lejos se pueden mencionar gente de todos los perfiles como Fujimori, Borick, Castillo, Bolsonaro, Trump, entre otros más notorios en la historia mundial.

Pero, a beneficio de Milei no se debe pensar como un “loquito suelto”, en mi opinión, es una persona muy formada, no solo en economía, también marketing, sintoniza muy bien con la gente, es auténtico, pues a sus palabra le siguen los hechos, radical, y tiene una formación filosófica propia, basada en la ESCUELA AUSTRÍACA, que es muy fundamentada,  pero vista de este artículo, que hacemos, es como una CONTRADICCION O FALSA CONTRADICCIÓN: un Hope que se orientó hacia el anarco capitalismo liberal, definido neoconservador, sale de la docencia doctoral de HABERMAS, un consumado colectivista, anarquista también pero que intenta hacer dialogar lo individual con lo comunitaria y el multiculturalismo.

En relación a Milei hay que esperar, todavía, y no despreciarlo, y si hay que refutarlo en la teoría y en la praxis, hay que ser muy fundamentado.

En ese sentido, me parece que las bases del nuevo enfoque de la Teoría de la Crítica de la Escuela de Fráncfort es una interesante base para un trabajo de debate permanente como quiere HABERMAS.

Van link de videos cortos para hacer más ameno e introductorio a una propuesta compleja y más amplia en filosofía.

VIDEO EXPLICATIVO DE LA TRAVESIA SOBRE HABERMAS1.

https://www.youtube.com/watch?v=8fIzHYpFWXA 10 MINUTOS.

En este vídeo te explicamos los conceptos fundamentales de la filosofía de Habermas, cuáles son sus bases tanto en filosofía como en ciencias sociales y las principales críticas que ha recibido. Si quieres apoyar la continuidad de este canal, resolver dudas u obtener material y exclusivas, visítanos en Patreon   / latravesia   EN ESTE VÍDEO: Jürgen Habermas y la Escuela de Frankfurt El Pensamiento de Habermas (La ética discursiva, o... dialógica, comunicativa o de la responsabilidad solidaria) Las Bases del Pensamiento de Habermas (Filosóficas, lingüísticas y psicológicas) Críticas a Habermas.






INFLUYENTES SOBRE HABERMAS: KANT, HEGEL Y PIAGET ENTRE OTROS

 

 

VIDEO EXPLICATIVO DE LA TEORÍA DE LA ACCIÓN COMUNITARIA DE HABERMAS.

https://www.youtube.com/watch?v=Yr4HUV8JOLw 8 MINUTOS.

La teoría de la acción comunicativa de Habermas se enfoca en cómo se establece el consenso y la comprensión en la sociedad a través del lenguaje y la comunicación. La teoría sostiene que la comunicación es un proceso en el que los individuos comparten significados y llegan a un acuerdo sobre el mundo que los rodea. Habermas argumenta que el discurso racional es la base de la acción comunicativa y que la distorsión del discurso, como la manipulación o la coerción, puede impedir la búsqueda del consenso y llevar a la dominación. La teoría de la acción comunicativa también aboga por una democracia deliberativa, en la que los ciudadanos participan en discusiones abiertas y reflexivas para tomar decisiones políticas informadas.

 

 

A MODO DE REFLEXIÓN

Como en todo análisis de nuestra SERIE FILOSOFÍA terminamos con comentarios que permitan seguir pensando y reflexionando, esta teoría de Habermas es muy didáctica, teniendo la virtud de 6 décadas de estar elaborando su teoría, también la valentía de hacer autocritica y de adaptarse a nuevas actualidades, inclusive, criticando lo que es políticamente correcto en un enfoque más occidentalista capitalista o un enfoque colectivista europeo o del marxismo del siglo XX, diferente a las propuestas de Marx.

No es sencillo caminar por el medio, o tal vez ser gris, por eso las críticas de uno y otro lado sobre la TEORÍA CRÍTICA DE LA ESCUELA DE FRANCFORT, y hoy de máximo exponente como HABERMAS.

Hay un fuerte debate o deliberación como aspira HABERMAS, entre la ESCUELA DE FRANCFURT Y LA ESCUELA AUSTRIACA, en Europa, pero también con las otras corrientes filosóficas del pensamiento contemporáneo, si bien todos son occidentales influidos por el capitalismo, no incluyen el pensamiento oriental y asiático que tiene más de 4000 años, como otros filósofos lo hacen, ni siquiera se toma en cuenta para mencionar la “culturización” de un enfoque religioso radical, si bien Habermas habla de dialogar con las religiones para incluirlas en la democracia deliberativa, eso es una tarea pendiente.

Tengo claro, que mi formación y tradición me hace estar más cerca de esta segunda etapa de la ESCUELA DE FRANCFURT QUE DE LA AUSTRIACA, en filosofía y en política, pero debo seguir los paradigmas que adhiero: todo es deliberativo, y todo puede cambiar, hay que ser estudiando.

 

BIBLIOGRAFÍA EN ESPAÑOL

(Ordenada conforme al año de publicación de la primera edición alemana)

Sobre Habermas (sólo publicaciones disponibles en castellano)

 

 

 

 

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